Ayer por fin culminó totalmente el semestre, salvo Educación Comunitaria, materia en la que tengo que entregar todavía un trabajo, pero de resto no me falta más nada sino saber si por fin me dieron el cambio de especialidad que vengo tramitando desde el semestre pasado para Educación Musical.
De esta manera, voy a hacer el siguiente balance sobre lo que ha sido este semestre para mí, es decir, lo que se refiere a aspectos positivos y negativos que caracterizaron este semestre, así como mis aciertos y errores:
Lo primero que tengo que decir es que este semestre comenzó y terminó de una manera atropellada por decirlo de alguna manera, pues perdimos mas de un mes de clases por culpa de los actos violentos de los delincuentes del centro de estudiantes que tuvieron como propósito impedir las elecciones de las autoridades universitarias, lo cual lograron hasta el punto de que terminó el semestre y no se llegaron a realizar, lo cual motivo que los profesores en su mayoría, como mecanismo de presión para que se sancionaran a esos vándalos decidieran en asamblea no dar clases. Ese fue, por supuesto, el principal aspecto negativo de este semestre, pues todo esto hizo que el final fuera atropellado, ya que nos tuvieron a millón.
Otro aspecto negativo fue Ciencias Naturales I, pues odio tanto la materia como el profesor y eso de alguna manera influyó en que estuviera a punto de quedarme y finalmente la haya pasado con una nota no muy alta. La materia la odio más que todo por las prácticas de laboratorio, pues no es mi fuerte y lamentablemente salí mal preparada en biología de secundaria y por eso mi desempeño tan pobre como nunca lo he tenido en materia alguna, a pesar de mis esfuerzos por salir bien. Al profesor lo odio por su forma de ser, pues es antiético, ya que usa la nota como arma para perjudicar a los alumnos; inmoral porque criticó a los profesores por dejar de dar clases cuando el problema con los vándalos e incurrió en las mismas prácticas; habla para adelante y para atrás, en vista de que asigna una actividad y el día de esa evaluación sale con otra cosa y nos hace ver a nosotros como irresponsables y lo peor del caso es que es tan prepotente que nunca rectifica, nunca acepta que pueda haber algún error de su parte. Pero en fin, estaba aspirando pasarla con la mínima nota (65) y la pasé con 74, quedando como mal educada por haber estado con una compañera que le subió el tono en vista de la forma grosera del profe de hablarnos cuando se dignó a abrirnos la puerta en vista de que golpeamos la reja, ya que nos tenía en una mamadera de gallo y no nos prestaban atención. Pero lo importante es que al menos la pasé y debo reconocer, por mucho que odie reconocerle algo bueno, que el profe fue generoso conmigo en esta ocasión al haberme hecho ajustes (cosa que me sacó al descargar su rabia por la situación antes mencionada). También hay algo positivo de esta materia y de ese profesor: el único momento grato que le debo es una actividad que realizamos en una Casa Hogar, pues aunque no estuve de acuerdo con el día y la hora por ser un sábado a las 2pm, día que tengo clase en el Conservatorio y hora justa a la que salía de clases, razón por la cual tenía que salir apurada hasta el lugar de la actividad, me pareció una experiencia agradable compartir con niños especiales y me inspiraron ternura, además de permitirme mostrar un poco de mi talento musical (hasta eso, llevar mi cuatro para tocar allá, fue idea del profesor). Lo de la actividad fue idea de ese profesor al que tanto odio y no reconocerle lo bueno sería mezquino de mi parte.
En Estrategia para el proceso de enseñanza y aprendizaje me dio una nota más baja de lo que esperaba (75), Geometría me da 81, Lectura y Escritura me da 90. Hasta ahora las dos notas más altas son Currículo (97) y Teatro (100). Sin embargo, estimo que por las notas de ciencias y estrategia me bajará el índice y una nota alta de Educación Comunitaria puede salvarme de eso.
Otro aspecto positivo de este semestre lo constituye Teatro, pues me ha ayudado a vencer la timidez y el miedo escénico, me ha hecho perder el sentido del ridículo, me hecho más extrovertida y me ha permitido desarrollar más mi sentido del humor.
Recuerdo que leí en el libro "El PODER PARA LOGRAR LO QUE QUIERAS" de Leo Alcalá que nuestras situaciones no dependen de las circunstancias sino de nuestra forma de ver dicha situación. Esto significa que debemos verle el lado positivo a todo porque lo tiene aunque muchas veces la rabia, la tristeza o el miedo nos deje ciegos en ese sentido y precisamente porque quiero verle el lado positivo a un semestre muy negativo es que hice esta reflexión y logré mi propósito.
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